INTRODUCCIÓN
Existen impedimentos para que un hijo de Dios pueda hacer la obra del Señor, esto puede ocurrir tanto en un cristiano quebrantado como en uno que no está quebrantado, por lo cual es de suma importancia reconocer el impedimento.
De acuerdo a la definición de la Real Academia Española, impedimento es “Obstáculo, embarazo, estorbo para algo.” Es decir, que existe un obstáculo que impide o retrasa que el quebrantamiento del hombre exterior se produzca en nosotros, o que impida que un cristiano quebrantado realice la obra de Dios.
Ejercicio: En una hoja, liste las actividades que realiza durante un día promedio y a continuación indique el porcentaje de su tiempo que dedica a cada actividad. Una vez realizada la actividad medite acerca de las prioridades que tiene en su vida.
Leer Romanos 8:6
En este caso el obstáculo es “la ocupación”. No podemos hacer dos cosas al mismo tiempo, nuestro tiempo es limitado, por lo cual para realizar algo debo dejar de hacer otra cosa. La ocupación es aquello a lo cuál damos mayor prioridad que a las cosas de Dios. Si nuestra alma está llena de preocupaciones, tareas, apetitos e intereses propios, si tenemos nuestras manos completamente llenas de ocupaciones, difícilmente tendremos espacio para recibir lo que Dios tiene preparado para nuestras vidas. En un estado así difícilmente nuestro hombre exterior puede responder al llamado del Espíritu de Dios.
LA FUERZA LIMITADA DEL HOMBRE EXTERIOR
¿Cuántos Kilos puede ud levantar? ¿cuántos Kilómetros puede correr?
Si su límite son 40 Kilos no podrá llevar 20 kilos adicionales
Si su límite son 10 Kilómetros en 40 minutos, no podrá correr 20 más en el mismo tiempo.
Las fuerzas físicas del hombre son limitadas, así también el hombre exterior tiene fuerzas limitadas. No debe descuidar este principio. Si una persona entrega todo su amor a los padres, luego no tendrá amor para entregar a los demás. Lo mismo ocurre con la mente, si ud dedica todo su tiempo a pensar en determinado asunto, luego no tendrá fuerzas (ni tiempo) para pensar en otra cosa.
Leer Romanos 8:2, 4
El tiempo debe ser ocupado en las cosas espirituales y no en las cosas de la carne.
Mientras más ocupaciones tengamos, menos fuerza tendremos para servir al Señor.
Importante: Tener las manos vacías para servir al Señor.
CÓMO EL ESPÍRITU USA A UN HOMBRE EXTERIOR QUEBRANTADO
Para tocar vidas, el hombre interior necesita pasar a través del hombre exterior, por eso es tan importante el quebrantamiento. Por tanto, si el hombre exterior está agotado por tantas ocupaciones, Dios no podrá hacer Su obra a través de nosotros, ya que no habrá salida ni para el espíritu humano ni para el Espíritu Santo.
Sin la cooperación del hombre exterior, el hombre interior está incapacitado. Un claro ejemplo está en la evangelización, para poder compartir a alguien acerca de Cristo, no basta tan solo con que su hombre interior así lo anhele, sino que es necesario que el hombre exterior tenga la disposición (quebrantamiento) y las fuerzas para realizarlo. Es decir es necesario expresarlo verbalmente para que la otra persona comprenda el mensaje.
LA PERSONA QUEBRANTADA, NO SOLO EDUCADA
El cristiano cambia desde dentro, Dios esta interesado en nuestro interior, en nuestro carácter, por tanto un cristiano no es apto para trabajar sólo con lo que ha aprendido, sino que complementario a aquello debe haber pasado por la escuela del quebrantamiento.
Leer Romanos 8:28
Leer Números 22:21-34
Es importante reconocer la mano de Dios en nuestras vidas, es absolutamente necesario que Dios quebrante nuestro hombre externo y nos transforme.
UNA LEY QUE NO ES AFECTADA POR LA ORACIÓN
Orar nunca puede cambiar la ley de Dios, dado que Él es inmutable. Dios tiene un propósito claro y es quebrantarnos y liberar nuestro hombre interior para que Él nos pueda utilizar. Es necesario que aprendamos a someternos a Dios, ser mansos para comprender sus caminos.
Leer Jeremías 18:1-6
